Peugeot RCZ, cuando ir un paso por delante se convierte en una virtud.

Puede que la hegemonía del Audi TT tenga los días contados, pero de lo que no cabe duda es de que al de los cuatro aros le ha salido un duro rival. Y es que el Peugeot RCZ tiene un comportamiento extraordinario, un diseño que cautiva, unos acabados que nada tienen que envidiar a las marcas Premium y, por si fuera poco, su precio parte de 29.000 euros. En definitiva, que lo tiene todo para lograr el éxito comercial. De hecho, en Alemania el número de pedidos ya sobrepasa en más de un 40% las previsiones anuales de Peugeot.

Diseño exterior

Si tuviéramos que destacar un rasgo estético para caracterizar al Peugeot RCZ elegiríamos el doble abombamiento de su techo y luneta trasera. Rasgo que además de servir al diseño tiene una clara vertiente práctica, por cuanto que mejora la aerodinámica y proporciona holgura para las cabezas en el habitáculo. Tampoco pasan desapercibidos su generoso ancho de vías trasero y sus abultados pasos de rueda que crecen para marcar hombros en la parte trasera y avanzan buscando los faros en la delantera.

Su armoniosa y musculada carrocería se matiza con los arcos de techo en aluminio y la línea discontinua de los laterales que delimita la superficie acristalada. En su denominación, ningún número, solo las siglas cromadas RCZ se inscriben en un extremo de la zaga, justo por debajo del alerón escamoteable. Y en el lugar preferente del frontal luce orgulloso la renovada insignia del león.

Habitabilidad

Entrar al habitáculo tiene el inconveniente de todos los cupés: que hay que agacharse más de lo normal, pero una vez dentro resulta sencillo encontrar una postura cómoda a sus mandos. Los botones de la consola central se identifican y alcanzan rápidamente. Y también, según qué funciones, podemos controlarlas desde los mandos situados tras el volante. Un volante por cierto, un tanto grande para nuestro gusto, pero que, sin embargo, permite ver sin dificultad alguna el cuadro de relojes a través de su aro.

Y hablando de visibilidad, ésta es buena hacia atrás pero, sin embargo, la baja posición del espejo retrovisor interior sumado a la pantalla del navegador cuando está en uso, hace que la visión a través del parabrisas delantero se vea algo reducida en la parte central del mismo.
Los asientos de las plazas delanteras son tipo baquet, con los reposacabezas integrados, y aunque resultan cómodos su ergonomía es estupenda puesto que para llegar a apoyar la cabeza es necesario echarla muy para atrás.

Para facilitar el acceso a las dos plazas posteriores, que aunque no aptas para adultos ahí están, el RCZ cuenta con unas generosas puertas. Claro que esto se convierte en desventaja para entrar y salir del vehículo cuando el hueco que tenemos para aparcar es estrecho.

Mención especial merece el maletero del RCZ, pues ofrecer 384 litros de capacidad no es lo habitual en su categoría. El Audi TT dispone de 290 litros. Además, si se abaten los respaldos el volumen de carga se amplía a 760 litros. Y aunque hay espacio para la rueda de repuesto, en lugar de ésta hay un kit reparapinchazos.

Comportamiento

La estabilidad es una de las cualidades sobresalientes del Peugeot RCZ. La excelente puesta a punto del chasis, que aunque derivado de la misma plataforma que el 308, el 3008 y el 5008 goza de diversas modificaciones que hacen que el RCZ mantenga la trazada con la misma fidelidad que si circulara sobre raíles.

Comparado con un Peugeot 308 berlina, el centro de gravedad del RCZ está rebajado 40 mm y la base rodante 23 mm. También es 30 mm más ancho, mientras que si nos centramos en las vías la delantera se ha ensanchado 44 mm y la trasera 63 mm. Aparte de que los ejes y la amortiguación se hayan adaptado específicamente para este modelo.

Asimismo, cuenta con un alerón trasero que emerge de su “escondite” adoptando un ángulo de 19 grados cuando se superan los 85 km/h. Dicen en la marca que así se equilibra el consumo, pero esta no es su única función dado que por encima de los 155 km/h se coloca a 34 grados para proporcionar mayor sobrecarga en el eje posterior y favorecer que se pegue literalmente al asfalto. Dicho alerón también se puede desplegar pulsando un botón situado junto a la palanca del cambio.

De serie monta llantas de 18 pulgadas con neumáticos de medidas 235/45 que también aportan su granito de arena para que el conductor note el asentamiento del coche en la carretera. Mientras que los posibles baches e irregularidades le llegan bastante filtrados gracias al eficaz trabajo de la suspensión.

La dirección es precisa y rápida así que no se pierde agilidad en los tramos virados.

Seguridad

Dentro de las ayudas electrónicas a la conducción destinadas a la seguridad que el RCZ incorpora de serie figura el control de tracción inteligente integrado en el ESP. Este sistema, reservado solamente para los modelos con caja de cambios manual, permite mejorar el agarre en superficies de baja adherencia.

La ayuda al arranque en cuesta, los faros bixenón direccionales, 2 airbags frontales y otros 2 laterales para los ocupantes de las plazas delanteras y el sistema de capó activo desarrollado para reducir los daños al peatón en caso de atropello también forman parte del equipamiento de serie del nuevo coupé de Peugeot.

Y como novedad contará con los servicios “Peugeot Connect SOS” y “Peugeot Connect Assistance” de forma que en caso de accidente, bien manual, bien automáticamente, se realiza una llamada de emergencia a través de la cual se localiza la posición exacta del vehículo para que puedan acudir rápidamente los servicios de asistencia.

Valoración

Como decíamos en la introducción de esta prueba, el Peugeot RCZ cuenta con todos los argumentos necesarios para convertirse en un todo un éxito de ventas, dentro, por supuesto, de los modelos de su categoría: los coupés de tamaño compacto, que aunque hay varios, por estética y carácter el más parecido es el Audi TT.

El caso es que el RCZ convence y lo hace muy muy bien. Convence por precio, convence por diseño y por nivel de acabado pero, sobre todo, convence por comportamiento, excelente en este vehiculo.

Nota Final: 8,5