La gran cuota de mercado general que posee el Ampera se ve reforzada por su excelente posicionamiento de liderazgo en Holanda con una cuota de mercado del 66% de los eléctricos, en Suiza con un 31%, Alemania (28%) o Bélgica (22%).
Aunque las ventas totales de vehículos eléctricos en Europa se han incrementado en un 130% respecto al mismo periodo en 2011 (Enero-Octubre), se han quedado muy por debajo de las previsiones de los expertos de la industria. A pesar de esta decepción, Opel ha conseguido incrementar las ventas del Ampera en Europa al menos hasta el doble del crecimiento del mercado Europeo de coches eléctricos.
80 Km sin contaminacion
Las ruedas del Ampera se mueven siempre con energía eléctrica, la diferencia está en el modo de obtenerla. Y es que el sistema de propulsión del Ampera cuenta con un motor eléctrico de 150 CV que se alimenta directamente de la batería de ION de litio, la cual se recarga enchufando el coche a una toma de corriente; pero también dispone de un motor/generador eléctrico de 72 CV que recibe la energía necesaria de un motor de gasolina 1.4 de 86 CV o, según el caso, de la batería.
Dependiendo del estilo de conducción se pueden cubrir distancias de entre 40 y 80 km en el modo puramente eléctrico, libre de emisiones. En modo Autonomía Extendida esta cifra aumenta hasta los 500 km sin tener que repostar.
Diseño exterior
El Ampera tiene una longitud de 4,50 metros, una altura de 1,44 m y una anchura de 1,79 m, así que tiene un tamaño similar al Toyota Prius aunque su aspecto nos parece más contundente y deportivo. El ancho de vías, sobre todo el trasero (1.57 m) juega un papel muy importante en este aspecto pero también los paragolpes pues están tan integrados en la carrocería que casi se funden con ésta.
El frontal adopta el mismo diseño de ópticas en forma de “boomerang” que el nuevo Zafira Tourer. Y la parrilla trapezoidal característica de Opel acoge en el centro el logotipo cromado de la marca.
En el lateral destaca la banda de color negro brillante que recorre la parte inferior de las ventanillas haciendo que parezcan más grandes y se adentra en la aleta delantera, lugar donde aparece el distintivo “Ampera” en letras cromadas.
La zaga está marcada por la horizontalidad de sus líneas, el alerón integrado en el portón y un paragolpes con formas aplanadas y acentuados pliegues.
En el lado posterior derecho encontramos la boca de carga del depósito de gasolina, mientras que la parte anterior izquierda está situada la toma para la recarga eléctrica.
Habitabilidad
Del interior del Ampera destaca el diseño envolvente del salpicadero y una consola central de corte futurista con selección táctil de la mayoría de sus funciones. La parte superior de la misma la ocupa una pantalla en la que se puede visualizar el estado de carga del vehículo, la eficiencia del estilo de conducción o el control de la climatización, entre otros. Mientras que en otra pantalla, equivalente al cuadro de relojes en un vehículo convencional, se muestra información sobre la autonomía, los modos de conducción, la velocidad, etc.
El habitáculo tiene capacidad para cuatro pasajeros. Los asientos, todos ellos individuales son confortables y amplios. El maletero tiene un volumen de 310 litros pero como los respaldo de los asientos traseros se pueden abatir, la capacidad de carga puede superar los 1.000 litros cuando no se necesitan las plazas traseras.
Mecánica
Las ruedas del Ampera se mueven siempre con energía eléctrica, la diferencia está en el modo de obtenerla. Y es que el sistema de propulsión del Ampera cuenta con un motor eléctrico de 150 CV que se alimenta directamente de la batería de de litio, la cual se recarga enchufando el coche a una toma de corriente; pero también dispone de un motor/generador eléctrico de 72 CV que recibe la energía necesaria de un motor de gasolina 1.4 de 86 CV o, según el caso, de la batería.
Esto se debe a que, circulando en modo eléctrico, mientras no se sobrepasen los 100 km/h es el motor principal el que mueve exclusivamente al Ampera, pero por encima de esta velocidad también entra en funcionamiento el motor eléctrico auxiliar, el mismo que también funciona como generador, y en este caso la electricidad proviene de la batería.
Cuando la carga de la batería se reduce hasta aproximadamente un 25% de su capacidad entra en funcionamiento el modo de autonomía extendido de forma totalmente automática e inapreciable para el conductor si no fuera por el ruido de fondo del motor de combustión, que como ya hemos indicado es el encargado de producir la electricidad necesaria para que el Ampera sigua su ritmo.
Comportamiento
Las prestaciones son las mismas independientemente de que la energía para la tracción proceda de la batería o del generador alimentado por el motor de gasolina. Acelera de 0 a 100 km/h en 9 segundos y alcanza una velocidad máxima, según su ficha técnica, de 161 km/h. Y como el par es instantáneo, al Ampera resulta especialmente ágil en ciudad.
Se puede elegir entre cuatro modos de conducción: Normal, Sport, Montaña y Retener. El modo Montaña se encarga de que la batería mantenga un nivel de carga suficiente para suministrar potencia suplementaria en caso necesario y que las prestaciones de coche no se vean comprometidas en subidas prolongadas. Se recomienda activar este modo unos 10 minutos antes de comenzar la ascensión. El modo retener lo que hace es preservar la carga de la batería para que esté disponible en el momento que el conductor la requiera. ¿Cuando resulta útil? Pues cuando nuestro viaje comienza fuera de la ciudad y queremos que disponer de toda la carga de la batería para circular por la urbe sin que entre en funcionamiento el motor de combustión.
Cuando se pone en marcha el motor de gasolina desaparece, en parte, ese “hechizo” propio de los vehículos eléctricos que hace que parezca que uno se desplaza medio flotando, pero hay que decir que incluso en el modo de autonomía extendida la suavidad sigue predominando en el Ampera.
El comportamiento del Ampera es similar al de una berlina convencional de su tamaño, estilo y prestaciones equivalentes, aunque se siente más pesado y también hay que acostumbrarse al tacto del freno.
Seguridad
Dentro del equipamiento de seguridad el Ampera incluye airbags frontales de dos fases y airbag de rodilla para el conductor y el acompañante, airbags de cortina en las dos filas de asientos y airbags laterales para tórax y pelvis en los asientos delanteros.
También cuenta con ABS con distribución electrónica de la frenada (EBD), control de tracción y control electrónico de estabilidad.
El freno de estacionamiento es eléctrico.
Valoración
El Ampera tiene cualidades de sobra para elevarlo a la “categoría” de berlina media ideal. Tiene las ventajas de un coche exclusivamente eléctrico pero sin la desventaja de la autonomía y aunque ésta, sin el apoyo del motor de gasolina, es limitada, resulta suficiente para la mayoría de los trayectos urbanos y para el resto, la media de consumo también es inferior a la de un vehículo diesel equivalente.
En la marca aseguran que el coste de mantenimiento “es similar al de un Opel convencional”, así que su principal desventaja es el precio.
Nota Final: 8,9
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