sábado, 29 de diciembre de 2012

Isuzu D-Max




Isuzu, líder mundial, junto con Toyota, en fabricación de pick ups y referente en motores diésel, no ha tenido hasta la fecha un importador en nuestro país que supiera hacer valer el potencial del D-Max, del que se vienen fabricando 400.000 unidades al año y que es líder de ventas en muchos países del mundo.

Diseño


Aunque mantiene el aire de familia con respecto al modelo anterior, el aspecto ha cambiado totalmente. Más ancho y con una línea más aerodinámica, el aspecto del frontal, en el que crece de tamaño el logo de Isuzu, es mucho más potente, deportivo, aerodinámico y robusto.
Los faros han sido totalmente rediseñados y ahora son elipsoidales, cuentan con luces de día y antinieblas más integrados en el paragolpes. Los pilotos traseros también son de nuevo cuño, y ofrecen mayor visibilidad y luces de Led.
En la vista lateral ya se intuye el rediseño al que ha sido sometido y la mejora en aerodinámica con respecto al modelo anterior es del orden del 5%.
Quizás la principal novedad en lo que a carrocería se refiere, se da en la versión de cabina extendida, la que tuvimos oportunidad de probar más a fondo. Nos referimos a la incorporación de una segunda puerta para acceder a la plaza trasera, aspecto que pasa desapercibido por no tener mando externo para abrirla, pero que sin duda le dota de unas cualidades que el modelo anterior no poseía.

Habitabilidad

Al haber crecido hasta los casi 5,30 m. de largo (5.295 mm) y haber ganado otros 50 mm de ancho de vías, mejora la habitabilidad en cualquiera de los tres tipos de cabinas disponibles. En todos los casos la anchura a la altura de los hombros ha crecido 10 mm, situándose en 1.460 mm.
En el caso de la cabina sencilla, la práctica totalidad de la mejora se la lleva la caja de carga que pasa a tener un longitud interna de 2.305 mm (+35 mm), un ancho de 1.570 mm (+40 mm), y una altura de 440 mm (-10mm).
La cabina extendida gana espacio detrás, concretamente 15 mm de distancia entre el respaldo del asiento delantero y el panel trasero. Además los dos asientos abatibles traseros son de mayor tamaño que en el modelo anterior y las ya mencionadas nuevas puertas traseras facilitan enormemente la acción de entrar o salir. En cuanto a la caja de carga mantiene su longitud interna de 1.795 mm pero gana 70 mm (1.530 mm), de ancho interno.
En la doble cabina mejora el ángulo de los asientos traseros, que pasa de 21º a 24º. Su caja crece considerablemente y pasa a tener una longitud de 1.552 mm al plano de carga (+138 mm), 1.485 mm a nivel de cabina (+105mm), y un ancho interno de 1.530 mm (+70 mm).
En todos los casos la abertura del portón trasero es más ancha para facilitar la carga en la caja, y ésta es más cuadrada y aprovechable.
El interior ha mejorado tanto en la calidad percibida como real, y así tanto los plásticos como los asientos mejoran, pudiendo llegar a ser de cuero  (en la serie especial Quasar), con control eléctrico y calefactables.
El asiento del conductor es regulable en altura, la situación de todos los mandos es más cómoda e intuitiva, disponiendo ahora de control cruiser en la parte derecha del volante, y dejando la parte izquierda reservada para el control del equipo de sonido en las versiones que lo llevan.
Ha crecido la cantidad y variedad de espacios portaobjetos, incorporando ahora una doble guantera a la derecha, una de ellas con toma de corriente. Hay otra guantera superior situada en el centro del salpicadero y huecos reservados para botellas tanto en las puertas como en los asientos traseros. También hay nuevos espacios escamoteables, situados bajo las tomas de aireación laterales que sirven de portabotellas o portaobjetos, al alcance tanto del conductor como del copiloto.
En el túnel central hay otro doble alojamiento portavasos-cenicero y el reposabrazos delantero, con un buen hueco interior, también incorpora un portagafas situado sobre el retrovisor y bajo los dos asientos traseros (recogibles hacia atrás), se encuentran sendos huecos ideales para llevar la herramienta, algún paraguas, chubasquero o cualquier otro objeto.
El nivel de ruido y vibraciones ha descendido notablemente gracias al nuevo motor, las nuevas suspensiones, la insonorización del capó y el diseño más aerodinámico. En el aspecto del ruido se sitúa al nivel de cualquier SUV de última generación, lo que no es poco para “un camión”.
La habitabilidad de todas las plazas ha mejorado gracias a un suelo más plano y a la incorporación en las plazas delanteras de unos cómodos agarraderos, también de mucha utilidad en conducción off road. Para esto (conducción off road), ahora la manera de actuar la tracción 4 o las reductoras, es a través de un dial giratorio en lugar de la antigua botonera.

Motores 

El motor es un tetracilíndrico en línea longitudinal a la marcha, 2.5 diesel, biturbo, intercooler, common rail, que entrega 163 CV a 3.600 r.p.m. y un par de 400 Nm. desde tan solo 1.400 r.p.m. y hasta las 2000 r.p.m.

El nuevo motor aporta muchas mejoras respecto al anterior, pero curiosamente, mantiene el mismo bloque. Su probada robustez, fiabilidad y elementos sobredimensionados que le aseguran una vida útil de muchos cientos de miles de kilómetros, aconsejaban no cambiar una de las mejores cosas que tenía el D-Max.


Sin embargo, la evolución en el resto de la cadena cinemática es tan grande que más que de evolución hay que hablar de nueva creación. 

Quizás la principal novedad sea el doble turbo o turbo bifásico, que le permite (al pequeño), “soplar” desde muy bajas vueltas lo que da como resultado la importante cifra de par que alcanza. Y más destacable que la cifra de par máximo es ver, en su curva de potencia, como a tan solo 1000 r.p.m., prácticamente por encima del ralentí, el par ya es de 250 Nm. Para hacerse una idea de la mejora es necesario comparar estas cifras con las del modelo anterior. El antiguo 2.5 que entregaba 136 CV, ofrecía una cifra de par máximo de 280 Nm en los “alrededores” de las 2.500 r.p.m. La comparación con el anterior 3.0 de 163 CV, también es significativa, ya que éste, entregaba un par máximo de 360 Nm (versión manual) y 333 Nm (versión automática), y en ambos casos a un régimen de revoluciones muy superior.

Pero las prestaciones se consiguen, además de lo anterior, por toda una batería de innovaciones que incluyen una nueva cámara de combustión, de diseño “High swirl” o de remolino, nuevo diseño de válvulas, pistones bordeados de polímero (que evita el “sufrimiento” de los pistones en frío) y un intercooler más grande y montado frontalmente (en lugar de colocarse en el capó), para mejorar la aerodinámica y garantizar mayor refrigeración y por tanto, rendimiento. La presión en rampa ha aumentado a 200 Mpa (antes 180 Mpa) e incorpora nuevos inyectores de 8 salidas (antes 6) y un enfriador de válvula EGR de mayor tamaño con sistema bypass.
 
También ofrece un catalizador de gran tamaño y un filtro DPD o antipartículas autoregenerativo (no hay que ir al taller para regenerarlo).

En cuanto a las transmisiones, mantiene el actual sistema de tracción trasera con 4x4 conectable en marcha y reductoras, sin embargo, el cambio, tanto en la versión manual como en la automática, gana una marcha. En el primer caso, pasa a ser de seis relaciones y en el segundo, de cinco.

Estas nuevas cajas han permitido incorporar una primera marcha mucho más corta que la anterior y por lo tanto más apta tanto para arrancadas con mucha carga como en uso off road, y una última velocidad, ligeramente más larga que la anterior directa, consiguiendo una menor rumorosidad y mejores consumos pero manteniendo su usabilidad (no es un overdrive, vamos).

Todas las versiones pasan a disponer de Control de Tracción y de Estabilidad, desconectables en cualquier momento por el usuario y de manera automática en el momento de engranar la reductora.

Valoración Final

Con un consumo homologado de 7,4 l. (cambio manual), 163 CV y un par de 400 Nm, equipación y terminación interior comparable a cualquier SUV, una capacidad de carga como solo las pick up pueden conseguir, un cambio de marchas perfectamente escalonado tanto para su uso off road como en carretera, unas potentes reductoras y una estética moderna y “poderosa”, este pick up llega con intención de situarse en lo más alto de su segmento, mirando muy de frente hacia las compañías de renting, poseedoras de casi el 80% del parque de pick ups, gracias a unas características y versatilidad que lo hacen ideal para el uso al que éstas le someten.

viernes, 28 de diciembre de 2012

Opel Insignia Biturbo, un paso por delante.


La berlina de Opel recibe su versión tope de gama en el ámbito del gasóleo con una mecánica biturbo diésel,d disponible tanto en tracción delantera como a las cuatro ruedas. Su alto nivel de prestaciones contrasta con un ambicioso nivel de consumo. 
La importancia del Insignia para la firma alemana sigue al alza. Ahora estrena la versión que se convierte en techo de la gama diésel, movida por un motor 2.0 CDTI de 195 CV y cuatro cilindros que entrega un par máximo de 400 Nm. Uno de los aspectos que más cabe reseñar se encuentra en el ahorro de combustible pues, con carrocería sedán, tracción delantera y cambio manual de seis velocidades, homologa una media de 4,9 litros cada 100 kilómetros con unas emisiones de 129 g/km de CO2. Esta misma variante acelera de 0 a 100 km/h en 8,7 segundos y es capaz de alcanzar una velocidad punta de 230 km/h. Debe subrayarse que todas sus versiones con cambio manual disponen de sistema Start/Stop.
Alternativas Variadas
El nuevo motor puede escogerse junto con tres carrocerías diferentes, sedán de cuatro puertas, berlina de cinco y Sports Tourer. Asimismo, se comercializa con cambio manual o automático de seis velocidades y dos tipos de tracción, delantera o total con diferencial autoblocante trasero de control electrónico.
Las nuevas versiones biturbo de gasóleo comienzan en 32.524 euros y llegan hasta los 36.900 euros. Con la llegada de este potente bloque, la gama diésel del Insignia pasa a contar con cuatro alternativas mecánicas que van desde los 110 hasta los 195 CV.
Las novedades no se quedan aquí y es que, a partir de la próxima primavera, las variantes con tracción a las cuatro ruedas podrán pedirse junto con el chasis denominado SuperSport, que incluye la suspensión delantera del Insignia OPC. Este paquete incorpora el sistema electromecánico de chasis FlexRide con sistema adaptativo de suspensión electrónica, frenos Brembo de altas prestaciones y suspensión delantera con HiPerStrut
Un paso adelante en eficiencia
Por otro lado, la marca alemana también ha mejorado la eficiencia del motor gracias a la tecnología CleanTech, cuyo objetivo es controlar electrónicamente el proceso de combustión mediante sensores instalados en las bujías. La seguridad del Insignia también evoluciona debido al nuevo control de crucero adaptativo mediante radar (ACC) opcional. Este sistema mantiene la velocidad de crucero marcada pero adaptando la distancia de seguridad con el vehículo que circula delante. Asimismo, el sistema incluye funciones como el indicador de distancia de seguridad (FID), la alerta de colisión frontal (FAC) y el frenado de colisión inminente (CIB).
El motor que estrena el Insignia cuenta con dos turbocompresores de diferente tamaño que trabajan de forma coordinada. El más pequeño se encarga de acelerar de forma muy rápida a bajas revoluciones de modo que, a partir de 1.250 rpm, se cuenta con un par motor de 320 Nm mientras que el máximo de 400 Nm se obtiene a 1.750 rpm. Mientras tanto, en la zona media del cuentarrevoluciones los dos turbocompresores actúan conjuntamente. En altos regímenes es el turbo más grande el que recibe todo el flujo de gases de escape, con lo que se consigue mantener una elevada entrega de fuerza a grandes velocidades.
En conclusion estamos ante un coche muy muy bueno, quizas un  poco por encima del resto de sus rivales y cada vez mas cerca del aspecto "premium" y gracias a este motor Biturbo ha ganado en refinamiento y deportividad que ya de por si tiene en cualquiera de sus mecanicas, un producto totalmente recomendable.

Nota Final: 8,8

jueves, 27 de diciembre de 2012

Ford B-MAX, practico y pequeño


El Ford B-Max llega para consolidar la fuerza de Ford en el mercado de monovolúmenes. Mide 4.077 milímetros, así que es unos 13 centímetros más largo que un Ford Fiesta y 28 más corto que un Focus. Teniendo en cuenta sus dimensiones exteriores y su concepto, llega para rivalizar con modelos como el Opel Meriva, aunque el modelo de la marca de Rüsselsheim es algo más grande (4.288 mm).

Se caracteriza por un innovador sistema de acceso. Ya existen otros monovolúmenes con puerta trasera corredera, como el Mazda 5 o su hermano mayor, el Ford Grand C-Max, pero ninguno de ellos carece de pilar central. Eso permite dejar una zona de acceso al habitáculo de 1,5 metros de ancho, frente a los 70-80 cm que suelen dejar las puertas convencionales.

El Pilar B en realidad no desaparece, sino que queda oculto en el marco de ambas puertas. Además, se ha reforzado el resto de la estructura para asegurar la máxima seguridad en caso de impacto lateral. 


Mecánicas eficientes para el B-Max

La gama de motores que ofrece el Ford B-Max va orientada claramente a la eficiencia. Al que más importancia le quiere dar la marca del óvalo es al tricilíndrico de 999 cc Ecoboost, que está disponible en dos rangos de potencia: 100 y 120 CV. Este segundo con 'Start-Stop', lo que le permite ofrecer unas emisiones de solo 114 g/km, que son las mejores de su categoría. Aunque la gama de gasolina también contará con un 1.6 Duractec con cambio Powershift de seis velocidades con 105 CV de potencia. En otros países europeos también habrá un 1.4 Duratec de 90 CV, pero este no se venderá en España.

En el apartado diésel, se ofrece un nuevo propulsor 1.5 TDCi de 75 CV y el 1.6 TDCi de 95 CV, que también logra unas emisiones muy buenas: 104 g/km.

He podido probar las dos variantes más potentes tanto de gasolina como de diésel y si tuviera que elegir, me quedaría con el Ecoboost. Aunque es demasiado ruidoso en algunos momentos, sorprende por su buena respuesta a bajas revoluciones y por su elasticidad. Sin olvidar que tiene un consumo muy contenido: 4,9 l/100 km.

Por su parte, el 1.6 TDCi de 95 CV, marca un consumo envidiable de 4,0 l/100 km, aunque durante esta prueba por las carreteras alemanas y con una lluvia intensa durante gran parte del recorrido ha gastado una media 5,9 litros, según el ordenador de viaje.
Recordemos que todos sus motores de propulsion de gasoleo son de origen Peugeot, excelentes mecanicas.

La última tecnología para el B-Max

Todas las versiones del nuevo B-Max contarán de serie con la tecnología de ahorro 'ECOnetic', que incluyen la dirección asistida 'Electric Power Assisted Steering', que requiere de menor energía que los sistemas de dirección asistida hidráulicos, el 'Gear Shift Indicator' para señalar los momentos de cambio de marcha más eficientes, y el sistema de información al conductor 'Ford Eco Mode', que ayuda a los conductores a adoptar un estilo de conducción más económico. Además del 'Smart Regenerative Charging', que carga la batería en el punto más económico de un viaje.

En el apartado tecnológico también hay que mencionar el sistema multimedia SYNC, una interfaz de control de voz para la integración del sistema multimedia (desarrollado por Sony. Con demasiados botones, para mi gusto) con tu smartphone. Permite a los usuarios conectar teléfonos móviles y reproductores de música vía 'Bluetooth' o USB, hacer llamadas de teléfono sin manos y controlar la música y otras funciones usando comandos de voz. Un sistema, que se ofrece de serie en todas las versiones.

Entre las opciones disponibles en la lista de extras, creo que merece la pena destacar el 'Active City Stop', un sistema como el que ya incorporan el Volvo XC60 o urbanos como el Seat Mii, que detiene el vehículo en caso de impacto inminente si se circula a menos de 30 km/h.


Habitabilidad en el Ford B-Max

El interior es uno de los puntos fuertes del nuevo monovolumen pequeño de Ford, ya que permite abatir el asiento del copiloto y así dejar una superficie de carga de hasta 2,35 metros de longitud. Además, al abatir los respaldos de los asientos traseros el fondo queda plano y el maletero pasa de 304 litros a 1.386.

Los materiales empleados son los habituales en la marca. Superficies blandas con plásticos brillantes, que logran una buena combinación de calidad y solidez. Con los acabados ocurre otro tanto, porque cuenta con buenos ajustes y superficies bien rematadas.



Comportamiento dinámico

En este apartado no se le pueden poner pegas al nuevo B-Max, que como otros monovolúmenes de la marca cuenta con una respuesta directa más propia de un vehículo compacto, que de un vehículo de su categoría. Permite un paso por curva estable, la suspensión es firme (sin restar por ello confort) y la dirección asistida eléctrica tiene un tacto bastante directo.

Estará a la venta de manera oficial a partir del mes de octubre, aunque ya se aceptan encargos. Para que tengas claro dónde se coloca, cuesta unos 2.000 euros más que el Ford Fiesta, a igualdad de motor y equipamiento, es decir, que el modelo de acceso a la gama cuesta 16.900 euros.

Como acción de lanzamiento, siempre que reserves el nuevo Ford B-Max antes del 30 de septiembre, se ha creado la Versión especial Ecoboost Edition, cuyas 500 unidades se ofrecen por 15.450 euros.

Prueba a fondo del Ford B-MAX 1.0 Ecoboost 120 CV 

El maletero del Ford B-Max no es amplísimo, pero sus 304 litros dan de sobra para un par de maletas grandes y, además, esconde un pequeño hueco bajo el suelo. El borde de carga está a 70 centímetros del suelo y al abatir los respaldos el fondo queda plano, porque las butacas cuentan con un sistema especial de plegado que las desplaza de forma automática ligeramente hacia abajo.
Ya que hablo de la segunda fila de asientos en esta prueba, hay que destacar que pese a ser un coche de apenas cuatro metros de largo sorprende el hueco que ofrece tanto para las piernas como para la cabeza. Eso sí, le pondría tres pegas: la primera es que la plaza central es muy estrecha y poco aconsejable para viajar en ella; la segunda, que no hay reposabrazos en las puertas (al ser correderas, no hay hueco para ponerlo) y no sabes dónde colocar el brazo; y la última, que resulta un tanto complejo cerrar las puertas correderas desde dentro. En cualquier caso, no voy a ser yo quien niegue las ventajas de este tipo de apertura, que te facilita la vida enormemente, sobre todo cuando aparcas en batería.
Ya en marcha, debo reconocer que me ha parecido que el Ford B-Max 1.0 Ecoboost va sorprendentemente fino. Diría que, incluso, su suspensión es excesivamente firme para un monovolumen, aunque de este modo los balanceos apenas se aprecian al tomar las curvas.
El vehículo de esta prueba monta el propulsor 1.0 Ecoboost. Un tricilíndrico de 999 cc que entrega 120 CV. En cuanto aceleras a fondo la primera vez te das cuenta de que ofrece más de lo que cabe esperar, porque empieza a empujar con muchas ganas prácticamente desde las 1.000 rpm y estira sin desfallecer hasta las 6.000 vueltas, que es cuando entrega su potencia máxima.
Ahora bien, el frugal consumo que promete Ford B-Max es una quimera que solo alcanzarás si pisas el acelerador con todo el tiento del mundo, porque en este test, con condiciones normales de circulación, pese al sistema 'Start-Stop' se ha disparado hasta los 7,2 l/100 km. Es algo que nos está pasando con todos los Ecoboost.

Nota Final: 7,9

Rivales: Renault Modus, Opel Meriva

BMW X1 xDrive20i, el placer de la excelencia

Han pasado casi tres años desde que la marca de Munich acogiera en su gama a un nuevo integrante, el X1. BMW lo ha renovado recientemente con un “restyling” con el que su línea estética resulta algo más moderna y elegante sin que se hayan producido cambios profundos. El interior también ha recibido algunas modificaciones con las que se ha optimizado la ergonomía, por un lado, y se han mejorado ciertos materiales y añadido algunas ornamentaciones, por otro. El resultado es un puesto de conducción que se adapta como un guante y una mayor sensación de calidad percibida.


Diseño


El todocamino del fabricante alemán ha recibido recientemente un superficial lavado de cara con el que se ha puesto al día a nivel estético. En el frontal del vehículo se aprecian más superficies del mismo color que la carrocería, principalmente en la parte inferior. Asimismo, destaca la presencia de nuevas líneas en forma de V que recorren el capó siguiendo la prolongación de las líneas que flanquean la doble parrilla ovoide.
No hay que pasar por alto las ópticas de nuevo diseño, que están integradas por faros dobles redondos e incluyen nuevos anillos de luz diurna LED, sobre las cuales se encuentra un listón luminoso que se asemeja a una ceja. Por otra parte, los faros antiniebla se hallan en una posición distinta, integrados en una nueva línea transversal que cruza la parte central del morro.
El vehículo estrena retrovisores con los intermitentes integrados. Visto desde atrás, el nuevo X1 genera una mayor sensación de calidad gracias a la mayor superficie del color de la carrocería y también dispone de un nuevo protector de bajos. Se han ampliado las posibilidades en cuanto a colores exteriores disponibles, ya que ahora se pueden escoger cuatro tonos nuevos. La unidad que probamos equipaba el paquete M, con el que además de obtenerse una línea estética más deportiva se logra una mejor aerodinámica. Exteriormente, está compuesto por paragolpes y faldones laterales especiales, además de las barras en negro brillante de la parrilla delantera, entre otros elementos.

Habitabilidad
El nuevo X1 también ha recibido algunas novedades en su interior, aunque son más bien sutiles y no suponen una transformación notable. Destaca principalmente el hecho de que laconsola central se encuentre ahora más orientada hacia el conductor. Ello provoca una mejora de la ergonomía y facilita el acceso a los mandos y la sensación de control sobre ellos. También se aprecia cierta mejora en la calidad de acabados, ya de por sí fenomenal en el modelo precedente.
Debe señalarse asimismo la llegada de algunas ornamentaciones interiores cuyo objetivo es dotar al habitáculo de una mayor elegancia. A pesar de ellas, la presentación sigue siendo bastante sobria. Las plazas delanteras se caracterizan por el gran confort de los asientos y por la excelente sensación de amplitud que proporcionan. Los asientos posteriores permiten hasta 31º de inclinación, con lo que se pueden adaptar hasta lograr la postura más cómoda. No hay que obviar, por otro lado, que la longitud para las piernas en esta segunda fila es algo escasa si se deben alojar personas que superen la altura media. 
En lo que respecta al maletero, consta de un volumen de 420 litros, una capacidad buena para su segmento dada su longitud. No obstante, cabe señalar que en caso de inclinar al máximo los asientos traseros esta cifra se reduce hasta los 360 litros. Con estos respaldos totalmente abatidos se alcanza una capacidad de 1.350 litros. Para complementar el lujoso habitáculo del todocamino germano se puede echar mano del listado de opcionales, que incluye el equipo de audio Harman Kardon Surround Sound System, el navegador Professional con disco duro, el techo panorámico o el volante calefactable, entre otras muchas posibilidades que, por otra parte, exigirán un desembolso considerable en algunas ocasiones.

Motores
La versión xDrive20i que hemos probado alberga bajo el capó un motor 2.0 de gasolina de cuatro cilindros con la tecnología TwinPower Turbo de BMW. El propulsor cuenta con una potencia de184 CV y un par motor de 270 Nm entre 1.250 y 4.500 rpm. Dicha fuerza mueve con soltura al vehículo y hace que el motor responda de forma excelente desde bajas revoluciones. La entrega de par se mantiene constante hasta la zona alta del cuentarrevoluciones, donde su ímpetu se hace aún más evidente.
Esta versión del X1 es capaz de pasar de 0 a 100 km/h en 7,9 segundos, lo que supone una magnífica capacidad prestacional para su categoría. Combinada con el motor, la transmisión automática de ocho velocidades, ya presente en otros modelos de la marca alemana, es una de las incorporaciones al nuevo X1. Registra una excepcional rapidez a la hora de cambiar de velocidad, lo que fomenta el desarrollo de una conducción deportiva.
Con un consumo homologado de 7,5 litros cada 100 km (8,7 litros durante nuestra prueba), se sitúa en los primeros puestos de su segmento en materia de eficiencia. Para obtener cifras tan ambiciosas, la marca alemana ha equipado al modelo con el sistema de recuperación de energía de frenado y el sistema de parada y arranque automático, ambos de serie. En conclusion tiene una gama de motores excelentes tipicas de BMW y con su propio tacto de deportividad, estamos antes un Suv muy rapido, eficiente y muy equilibrado en todos los aspectos, sin duda una gran opcion, si lo que buscas es una deportividad y un motor un paso por delante de los demas, tambien por su calidad de rodadura y acabados.


Conclusión
Si bien los cambios a nivel estético en el nuevo X1 no son profundos, su imagen se ha actualizado dando como resultado un aspecto más moderno. Las novedades en el interior aún son más sutiles, pues se reducen principalmente a mejorar la ergonomía y los materiales que, en el modelo anterior, ya se caracterizaban por su alta calidad. Con la mecánica 2.0i, los ingenieros del fabricante alemán han logrado dar un paso adelante en términos de eficiencia y obtener un excelente rendimiento prestacional reforzado por la inclusión, por primera vez en este modelo, del cambio automático Steptronic de ocho velocidades. Todo ello se une a la gran efectividad del chasis, cuya deportividad puede crecer si optamos por el paquete M que montaba nuestra unidad.

Calificación 8,5

Principales rivales: Audi Q3, Mercedes GLK y Volkswagen Tiguan





martes, 25 de diciembre de 2012

Nueva Mercedes Citan 109 CDI 90cv


Si hace unas semanas veíamos como la nueva Clase A recurría al motor Renault 1.5 dCi en su versión de partida, ahora nos llega otra muestra de los acuerdos entre los fabricantes del rombo y de la estrella: el Mercedes Citan. Es evidente que el punto de partida es el Renault Kangoo asi que vamos a ver todo lo que tienen en común, que evidentemente es mucho.
De la parte inferior frontal a la base del parabrisas el Mercedes  es totalmente diferente del Renault. Parachoques, capó, aletas y por supuesto los faros antiniebla son específicos del Citan. Y mostrando orgullosamente una enorme estrella y su parrilla muy en la línea de la nueva Clase A , el Citan muestra todas sus señas de identidad al mundo.
En el interior del Citan también ofrece elementos propios como el salpicadero que no es el del Kangoo retocado sino un bloque completamente nuevo. Las toberas redondas de aire son muy de la casa y la estrella en medio del excelente volante no deja lugar a dudas. Este salpicadero, contundente en cuanto a formas y tamaño, si bien está realizado en un plástico duro propio de un vehículo industrial, ofrece una buena calidad percibida. Se echan de menos huecos para pequeños objetos en este salpicadero que si tiene el del Kangoo  si bien hay otros en entre los dos asientos, en las puertas, en el techo o escondidos bajo el suelo.
El Citan se ofrece con tres longitudes  (3,94, 4,32 y 4,71 metros) y tres tipos de carrocería (Furgón Mixta y Combi). En el caso del modelo probado se trataba de la Combi, pensada para transporte de pasajeros y que solo está disponible en la longitud intermedia de 4,32 metros, mientras que el resto de dimensiones (1,83 metros de ancho y 1,81 de alto) las comparte con sus hermanos. Y es también la única Citan que se puede matricular como turismo y que podemos contemplar como una alternativa a un monovolumen.
El acceso a las plazas traseras se hace por puertas correderas que resultan cómodas cuando hay poco sitio en un aparcamiento pero también son algo pesadas de manejar.
Como todo este tipo de vehículos (para los que se acuña el termino de ludoespaces)  el Citan ofrece un excelente volumen de carga y un inmenso habitáculo. Mas alto que un familiar e incluso que un monovolumen clásico, ofrece una real sensación de espacio a bordo y una luminosidad muy agradable gracias a su gran superficie acristalada. En la segunda fila de asientos destaca el espacio libre al techo y para las piernas. Hay anclajes Isofix en las plazas traseras laterales.
Con todos los asientos en su sitio, el volumen de carga del maletero es 685 litros utilizando el espacio hasta la bandeja. Si se abaten los asientos de la segunda fila y calculamos el volumen de carga hasta el techo, este llega a los  3000 litros. Para acceder al maletero hay un portón con luneta de una hoja batiente hacia arriba.
Más básico que un monovolumen, la modularidad que ofrece parece suficiente para la mayoría de las ocasiones, con una banqueta trasera abatible 2/3-1/3.
En marcha
De entrada nos encontramos con unos asientos delanteros diferentes a los del Kangoo. En el caso delCitan destilan solidez y en viajes largos se muestran cómodos.
La posición de la palanca de cambios en la consola, cerca del volante, también se traduce en comodidad pues apenas hay que mover el brazo. Además sus recorridos son cortos y es precisa.
En cuanto a su comportamiento dinámico, antes que nada hay que resaltar que frente al Kangoo, en elCitan se ha cambiado el tacto de la dirección, endurecido la suspensión y modificado la gestión electrónica de los motores. Los responsables de Mercedes hablan de un tacto diferente, de un comportamiento a la “alemana” . Para logar esto si bien no se ha cambiado la arquitectura de los trenes rodantes, en cambio  muelles y amortiguadores son más cortos y firmes (se ha perdido algunos milímetros de altura libre al suelo), mientras que las barras estabilizadoras delanteras y traseras son de mayor diámetro
Al volante se nota estos cambios: en efecto el Citan se balancea menos que su primo francés, gira más plano en las curvas y ofrece un carácter más reactivo, una mayor vivacidad de comportamiento, en definitiva un tacto más de berlina. A cambio resulta menos cómodo en carreteras de mal suelo. Tiene un control de estabilidad que la marca ha bautizado como Adaptative ESP ya que adapta su actuación al peso transportado. No se puede desconectar al contrario  que el control de tracción si bien este último se vuelve a activar automáticamente en cuanto se superan los 50 km/h o si detecta una situación de instabilidad.
La versión probada era el 109 CDI que lleva un motor diésel de 90 cv. Hay disponible otro de 75 cv (108 CDI) a los que el próximo año se sumará otro diésel de 110 cv (111 CDI)  y un gasolina de 114 cv.


Este 90 cv de la prueba va asociado a un cambio de cinco marchas. Los desarrollos tiran a cortos por lo que en ningún momento deja de empujar, incluso bastante cargados. Aunque esta caja está bien escalonada, en autovía se echa de menos una sexta más larga para reducir el sonido del motor en el interior. En cuanto al consumo medio el fabricante señala 4,6 litros pero en la versión BlueEfficiency, que era la probada, esta cifra se reduce a  4,3 gracias a un alternador que trabaja sobre todo en las deceleraciones, unos neumáticos (195/65 R13)  de baja resistencia a la rodadura y un sistema stop/start de parada y arranque automático del motor que funciona a la perfección: es rápido y discreto. Durante la prueba el consumo medio ha estado en los 6,1 litros si bien los pocos kilómetros de la unidad de pruebas nos hacen pensar que esta cifra se puede reducir una vez el motor esté más “suelto”.
En definitiva si bien son evidentes sus raíces de vehículo comercial, el Citan Combi puede ser una alternativa para uso familiar si se da prioridad al volumen de carga eso si si precio es elevado y respecto a la renault kangoo NO compensa.

Grandes historias, grandes vivencias, Seat 124D una vuelta al pasado.


Dado el éxito del 124, y la escasa diferencia de precio existente entre éste y el 1430, Seat decidió aumentar la capacidad de producción de la línea del 124, lo que exigía, desde el plano comercial, mejorar algunos detalles y permitiría afinar en el precio todo lo posible.
Estas mejoras, si bien algunas son sólo de aspecto, otras no lo son tanto; y unido al precio, francamente competitivo (113.900 Pts. f.f.) de este nuevo 124-D, la gama Seat se enriquece al adoptar un nuevo hijo en su seno al que auguramos un gran porvenir; puesto que, su relación precio-prestaciones-contort, es inatacable hoy por hoy.


INSPECCIÓN A COCHE PARADO
Exteriormente el 124-D se diferencia del anterior modelo por una parrilla de color negro mate y cromados alternados, que le dan un bonito aspecto. En la parte trasera los pilotos del 124-D, son ahora dobles, superpuestos, de aspecto global muy "cuadrado" que recuerda bastante los del Sport Coupé 1600. los pilotos son de unas mucho mayores proporciones que en el anterior modelo y sus intermitentes son más eficaces, al ser más visibles, sobre todo de noche.

En lo que respecta al cuadro, el 124-D tiene un panel de instrumentos en el que, aparte visibilidad, se conserva esa línea rectangular típica del coche, con velocímetro en díal alargado, termómetro y pilotos en luces grandes. A señalar que el limpiaparabrisas se acciona ahora por una palanca a la derecha y debajo del volante. Antes se accionaba sobre una tecla en el tablero y al buscarla con la vista se distraía uno momentáneamente de la carretera. Un detalle "tonto" pero de los que se agradecen. Los asientos delanteros, ofrecen la gran ventaja de ser deslizantes y de respaldo abatible hasta unirse con los de detrás. Son ahora de paño en el centro y ska! a los lados, anatómicos; por lo tanto muy confortables. La calefacción estaría fuera de todo reproche (pues es potente e instantánea), si pudiera mandar aire caliente a los pies y frío a la cabeza. Era algo difícil regularla y ahora tiene dos velocidades el motor del ventilador, pero creemos que.todavía es mejorable en el sentido apuntado-. Las nuevas válvulas de aireación, en los montantes posteriores, junto a la luneta, sirven en cambio para evitar remolinos de aire renovando el ambiente.

RENDIMIENTO

El motor del 124-D es el mismo del modelo anterior, no habiendo razón para cambiarlo, dado lo difícil de mejorar sus prestaciones. Hoy en día la cilindrada media, que es la que preconizan las principales marcas europeas, es la que tiene más campo por delante. En sí , las prestaciones de este motor son ya muy brillantes, y con gu cilindrada 1.197 c.c. consigue excepcionales performances.
En cuanto a la robustez del motor del 124, es a toda prueba, y a pesar de sus altas prestaciones, si su motor tiene fama, es porque el 124 es un coche que no rompe. Coge vueltas con facilidad y se le puede incluso pasar.de vueltas sin que se resienta. En definitiva nos encontramos ante un motor supercuadrado (diámetro superior a la carrera del émbolo), en el que la menor velocidad lineal del pistón asegura longevidad al motor y menor consumo de aceite.
El motor, sin embargo, es algo ruidoso incluso sin ir muy revolucionado. Atribuirnos esta sonoridad al efecto que causa desplazar el aire. las aceleraciones son especialmente muy briosas. El motor desarrolla 60 CV, potencia casi inverosímil para su cilindrada. Es muy elástico y se alimenta por medio de un carburador vertical doble cuerpo. El coche tiene un consumo discreto con tal de no pasar de 110/120 Kilómetros/hora. Al pasar de ahí, se abre el segundo cuerpo del carburador y se eleva el consumo. Esta solución ha sido incorporada por Fiat después de usar durante muchos años el carburador horizontal, pero hay que tener cuidado, si se quiere mantener el consumo de 8,5 litros por 100 Km.


VELOCIDADES
A pesar de no presentarse corno un coche deportivo, el 124-D es un coche bastante más rápido que muchos otros modelos -pseudo-deportivos, que últimamente están lanzando ciertas casas españolas. En cuanto a velocidad punta, rebasa los 140 Km/hora. El velocímetro llega, y el coche en ciertas condiciones super-óptimas también, a 160. Sin embargo lo mejor del 124 no es tanto su velocidad punta como su alta. velocidad de crucero, que podemos mantener por encima de los 120 Km/hora. A esta velocidad el coche consigue el coeficiente máximo entre consumo y performances. Es pues, la velocidad más recomendable.
En cuanto a las aceleraciones son muy briosas en primera y segunda velocidad, dejando para los tramos de montaña la tercera, bastante flexible, y la cuarta para llanear. Como decíamos, forzando el coche en buenas carreteras se pueden sobrepasar los 145 Km/hora.


CAJA DE CAMBIOS
La caja de cambios del 124-D tiene las cuatro marchas adelante sincronizadas y todas ellas se introducen a la perfección. El embrague es monodisco en seco, de diafragma, preciso y muy progresivo. Tan sólo es un poco duro de accionamiento mientras está nuevo, pero con una mayor presión del pie se soluciona. Por lo demás, este embrague tiene bien ganada fama de sólido. La palanca de cambios, va al suelo, en un lugar muy accesible y su manejo es sencillo y asombrosamente preciso. La primera entra con gran facilidad, y sin muchos esfuerzos por parte del conductor; la marcha atrás, depende. Las dos primeras marchas son algo cortas, aunque con la segunda se puedan superar los 70 Km/hora. La tercera es sin embargo la más útil. En montaña llega a subir hasta 105 Km/hora. En llano y a la hora de adelantar, la cuarta responde perfectamente aunque a veces sea preferible, o más seguro, introducir la tercera.

SUSPENSIÓN

La suspensión del 124 había causado muchos comentarios adversos y por eso Seat la modificó no hace mucho aún. En el 124-D, además de ser acogedora y confortable para los pasajeros, proporciona una excelente ayuda a la estabilidad del vehículo, que está muy lograda. Esta mejora de suspensión-tránsmisión y estabilidad, se logra por la adopción de unos tirantes longitudlnales, que asisten a las barras estabilizadoras en su cometido y acrecientan el agarre de las ruedas traseras, que antes tendían a levantarse excesivamente en las curvas cerradas, patinando, con la consabida pérdida de adherencia.


DIRECCIÓN
La dirección del 124-D es de tornillo sinfín y rodillo. Aunque siempre hemos mostrado nuestra predilección por las direcciones de cremallera, en el 124-D ésta se comporta con muy poco recorrido neutro entre la acción del volante y el efecto en la rueda. Sin embargo esta dirección tiene el inconveniente de tener que reglarse cada cierto número de miles de kilómetros según el coche en particular y los recorridos que suela efectuar. Para centrar la dirección y hacerla perder esa holgura que aparece cada cierto tiempo basta con levantar la caja de la dirección y manipular en ella, operación sencilla y de poco coste. En los aparcamientos, también notamos el peso del motor delantero. Una vez el coche en marcha, desaparece el esfuerzo y se maneja con suavidad.

                                                                                                                         FRENOS 
Si bien en este capitulo de Seat 124 siempre había superado las mas exigentes criticas, en el modelo 124D la adopción de un doble circuito de frenos, pone la seguridad de frenada fuera de comparación con cualquier otro coche de la industria nacional; y desde luego netamente delante de tantos deportivos. La mayoría de ellos tendrían que copiar el generoso sistema de frenado del 124D, al fin y al cabo un coche familiar y no de competición  Los cuatro frenos de disco, otorgan al 124D (que pesa un poco mas 850 kilos) una frenada excelente aun en piso mojado, donde su motor delantero le confiere un mayor agarre en las ruedas delanteras.



ESTABILIDAD

Con la adopción de los dobles tirantes traseros longitudinales (iguales a los del 1430) y su gran base de sustentación, el Seat 124-D se ha cortvertido en uno de los coches más estables que hay. Una de las adquisiciones del nuevo modelo ha sido el equipar a toda la serie de neumáticos radiales, reemplazando a los diagonales, -que aunque menos ruidosos no daban el resultado de éstos -. De entre los que surten la gama Seat, los que mejor resultado proporcionan en este coche puede que sean los Cinturato Pirelli. Los demás, sin embargo, también son buenos. En las curvas y si se trata de ir de prisa, el coche tiene un comportamiento parecido a una tracción delantera. Una vez que hemos pasado el morro del coche y por consiguiente la zona en donde gravita el mayor peso de éste, podemos decir que el viraje ya ha sido realizado y por muy fuerte que entremos, si ya hemos pasado de la mitad de la curva, lo más que tendremos que hacer es corregir un poco a la salida.


CONSUMO
A pesar de sus performances, el Seat 124-D es un coche con un consumo discreto dentro de su categoría. Por carretera y sin forzar el coche, a una velocidad crucero de 120-125 el coche nos ha gastado 8,5 litros. Sin embargo si pretendemos sacarle al coche todo lo que da de sí, los l0 y los 11 litros se aproximan en seguida. En ciudad el consumo, en una utilización rápida, fue de 13 litros a los 100 Km., que es alto, si bien otros coches parecidos sufren del mismo defecto. En ciudad, raro es el que se escapa. No quisiéramos acabar este rápido examen sin volver admirativamente sobre el tema del precio, que como era de esperar, provocó una reacción casi inmediata a la baja en otra marca y puede ser el principio de una "guerra de las cilindradas medias", al estilo de la que se desencadenó hace un año con la de 850 c.c.
Fuente: Piel de toro






domingo, 23 de diciembre de 2012

Comparativa Ford Focus Vs Seat Leon

En los próximos días os traeremos la comparativa entre el Ford Focus y el Seat Leon.
¡Esperemos que os guste! 

¡Felices Fiestas!

Equipo de Autoemociona.


Nuevo Seat Leon 1.4

Lo primero de todo el equipo de AUTOEMOCIONA os desea unas felices fiestas a todos!


Seat no atraviesa por su mejor momento. La crisis en el mercado español, su principal mercado, no lo olvidemos, le ha impedido abandonar los números rojos con los que, por desgracia, ha tenido que convivir en los últimos años.

Su estrategia para remontar el vuelo pasa por una ofensiva notable de producto de desarrollo económico por el hecho de ser modelos compartidos con otras marcas del grupo (Mii, ToledoExeo, Alhambra) y por el papel clave que debe jugar el nuevo Leon. Este coche está llamado a convertirse en el segundo gran pilar de la marca, al mismo nivel que el Ibiza.


Plataforma MQB


Este nuevo Leon es un coche muy racional.Mantiene una cierta deportividad, tanto en el diseño como en el comportamiento, pero se aleja voluntariamente del look de la segunda generación y, sobretodo, de su arrolladora personalidad. Ahora es un coche más completo, más abierto a un público más amplio y con notables mejoras sobre la generación anterior.

De entrada conviene empezar diciendo que el coche utiliza la nueva plataforma MQB de Volkswagen, un conjunto modular que establece la inmovilidad de ciertas cotas pero que permite una mayor libertad tanto en el diseño de la carrocería como en el uso del enorme banco de órganos del Grupo.

El nuevo Leon es más habitable que su antecesor pero no porque sea más grande, que también (crece ligeramente en longitud, en anchura y en altura) sino porque la distancia entre ejes se ha incrementado en casi 6 cm.

Ello se traduce en más espacio interior en todas las cotas (espacio para las piernas, anchura a nivel de hombros y codos, altura libre al techo…) y en más capacidad de maletero, con unos notables 380 litros que están entre los mejores del segmento. El maletero, por cierto, no tiene ni doble fondo ni ningún tipo de accesorio pero puede ampliarse abatiendo los asientos traseros con lo que puede llegarse a 1.220 litros medidos hasta la altura de los cristales.

Motores

La gama inicial incluye dos motores de gasolina; los 1.2 y 1.4 TSi en dos niveles de potencia cada uno (86 y 105 Cv en el primer caso y 122 y 140 en el segundo) y dos diésel, el 1.6 TDi de 90 y 105 CV y el dos litros de 150. La gama se ampliará próximamente con, al menos otro gasolina; el 1.8 TSi de 180 CV y un diesel de dos litros y 184 CV a la espera de las versiones deportivas Cupra. La versión diesel llegará en febrero.

Por lo que respecta a las cajas de cambios, Seat sólo ha comunicado tarifas de las manuales(de cinco marchas para los motores menos potentes y de seis para el resto) pero se anuncian cajas DSG para el 1.2 de 105 CV de gasolina y para los Tdi de 105 y 150. Todo ello, sin embargo, irá llegando de manera escalonada a partir del mes de enero que es cuando el coche estará efectivamente a la venta. Los DSG, por ejemplo, se esperan para marzo.

Respecto a la gama de motores, comentar que el que quiera un diésel, perfecto, pero que el que quiera ahorrarse un dinero, puede optar perfectamente por un 1.4 de 122 CV. En la presentación del coche, pude rodar en las carreteras de los montes de Málaga con una unidad FR con este motor –los FR llevan suspensión deportiva y el Seat Drive Mode que permite seleccionar un modo deportivoque afecta a la entrega de potencia (al modo como la entrega, que no a la cantidad), a la dirección y al sonido del motor- y la verdad es que me pareció perfecto para el coche, con una potencia suficiente para conducir deportivamente si nos apetece, una elasticidad tremenda, un cambio muy adecuado y una suspensión impecable. Los fanáticos del Leon anterior, que los hay y muchos, harán bien en no interesarse por otra cosa que no sean las versiones FR.


A nivel de chasis, ligera decepción. Es obvio que la nueva plataforma es mejor que la anterior, con vías más anchas y más distancia entre ejes pero la posibilidad de montar determinados conjuntos de suspensión ha hecho que, como sucede también en el Golf e incluso en los Audi A3, que también llevan esta plataforma, todos los Leon de la gama inicial recurran a la suspensión trasera por barra de torsión, más barata que la de brazos múltiples que montarán el TSi de 180 CV y el diesel de 184 así como las versiones más deportivas futuras.

Este eje trasero más sencillo, que se monta por un simple cuestión de costes, no va mal pero no va como el multibrazo del Leon actual. El nuevo modelo ha perdido deportividad y no sólo por la suspensión claramente más suave –en especial en todos los que no son FR- sino también por ese eje trasero menos implicado cuando se trata de conducir deportivamente. El multibrazo cierra la trayectoria con más precisión –lo puedo asegurar porqué he probado ambos en los A3- mientras que el de barra de torsión se limita a acompañar al delantero, sin más. Ello hace que vaya más libre y que el coche sea más ágil pero menos preciso, especialmente en la negociación de curvas muy cerradas donde la parte trasera va más “suelta” de lo que debiera. Como no había ninguna unidad con los motores de 180 CV en la presentación, habrá que esperar a disponer de alguna para probarla a fondo y pronunciarnos sobre su comportamiento.

Habitabilidad 

El habitáculo es más habitable y más práctico. El nuevo diseño es más frío, más cuadrado, más Volkswagen si se me permite la expresión. En mi opinión pierde frescura e imaginación pero gana en funcionalidad. 

Ahora todo está en su sitio; los mandos de elevalunas y espejos en la puerta, los del climatizador en la parte baja de la consola junto a los de las regulaciones de elementos del chasis cuando se monten, y los del audio, el equipo de navegación y multitud de otros parámetros en la nueva pantalla central de 5 pulgadas (de serie desde el acabado Reference sólo para la radio y en los Style y FR con más funciones) que se maneja de manera táctil y con un interface muy interesante similar, en algunas funciones, al de un tablet de nueva generación.

En Seat destacan que la pantalla queda a la misma altura que la instrumentación, lo que se agradece ya que implica apartar poco la vista de la carretera para consultar cualquier cosa pero la integración de la pantalla no es excesivamente agraciada y queda poco elegante.

La calidad de los materiales es muy buena y el acabado es casi propio de un Golf, de manera que el Leon saca muy buena nota en la valoración de su habitáculo. Por lo que se refiere a los asientos, los delanteros son estupendos, tanto los de las versiones Style como los más deportivos que montan los FR mientras que los traseros tampoco están nada mal pese a que, como siempre, la plaza central es algo incómoda.